Inconcluso eres la mayor parte del tiempo
y por ello,
vas escribiendo historias mancas,
tratando de llenar tus vacíos,
y comiéndote la circunferencia del mundo
Pero estás incompleto,
partido en mil pedazos.
tan falto de ti
que nadie te es suficiente.
Fragmentado te presentas,
te sabes, te ocultas
y vas por allí,
obteniendo trocitos de vida ajena,
matando posibilidades,
mordiendo espíritus.
Muy a tu pesar,
(inclusive a tu mentira)
sigues fraccionado,
escaso de oportunidad de ser uno sólo.
Tan insatisfecho de ti
que inhibes en su totalidad tu historia.
Inconcluso eres la mayor parte del tiempo,
y es por ello que
medio comes, medio vives,
medio te entregas, medio amas.
Eres, tan “casi”
que a veces…
…Ni siquiera eres.