domingo, 21 de octubre de 2007

Abismo.

A veces Uno se encuentra atado a la inmensidad del abismo, Tan sumergido en el Que empiezas a dudar que todo alrededor sea real. Que lejos de simular una caída Estás ahí, por así decirlo, En una especie de levitación, Un estilo de existencia, Un encuentro con el vacío. El precipicio es ese espacio En el que flota la vida olvidada, la angustia acumulada, el dolor cicatrizado, la crucifixión, el odio… Y muchos pasajes de tu historia. El abismo es deliciosamente sádico. En él, las manos del mundo No son suficientes Y toda gira estrepitosamente. El ruido se vuelve eco, El sufrimiento abrazo Y el terror caricia. A veces Uno se encuentra atado a la profundidad del abismo Y te sientes vivo… Y te sientes libre.

5 comentarios:

alhanbsideblogg dijo...

Cada uno en carga de su propio inframundo... hacerse conciente del propio abismo, es sólo el primer paso a realmente encontrarse.

Sigue escribiendo por el bien de tus fans.

fabo dijo...

ha pasado el tiempo y no dejo de pensar que lo mejor que nos pudo suceder fue conocernos al menos un poco en el pasado, tal vez ahora es cuando mas le sacamos jugo a esos recuerdos, mas que una critica es una felicitación y no tienes idea del gusto en que me da el saber que dia con dia te vas puliendo en el aspecto profesional, escribir no es facil de eso estoy mas que seguro; sigue haciendolo vale... un bso

Anónimo dijo...

El tiempo es un vértigo interno, un filtro de estatuas sin raíces ("es el frío de estar lejos en un olvido espeso"). Madura los ojos, retarda la vejez en los hoteles, arde la harina del amor, ladra mi soledad de árbol. ¿Alguien sabe dónde están las horas asesinadas de las tardes? ¿alguien sabe dónde estás, dónde desangras la distancia? Estoy aquí: el silencio es un saludo.

-¡Déjenme en paz! No tardo, que yo nunca tardo...
-¡Y mientras tarda el Abismo y el Silencio quiero estar solo!

(Parte de una traducción que hice del poema "Lisborn Revisited" de Álvaro de Campos)

XoLü dijo...

Entre la ciudad y el abismo.

CADA UNO ES RESPONSABLE DE SUS PROPIOS ABISMOS... Los visualiza, ve, siente y cae por su propia fuerza de gravedad (que a veces, por un recuerdo, una sonrisa, un deseo) deja de funcionar y el abismo se torna en paraiso.

En ese sueño confuso, deja vu lúcido, recuerdos que no te tocan más...

Que rock Pam, schido que escribas y escribas sin parar.

Espero que tengas un día increíble, menos abismos y más levitaciones.

Byegón
JoLü

Anónimo dijo...

El peor abismo es el que nosotros mismo nos construimos, en nuestra mentes y con los moustros internos.

Gracias por compartir tu mundo conmigo.

Un beso y un abrazo con cariño!