Cuidar el corazón, a veces cansa.
habría que sacarlo del cofre en el que vive
y exponerlo un poco,
a las miserias de la vida.
Perderle a ratos, el miedo al latido,
y encontrarle sabor a la locura.
Dejarse llevar un poco,
exponerse.
exponerse.
Convertirse en alguien que puede ser herido,
Dejar de matricular emociones
y arrojarse cegado al vacío
por la pura curiosidad, de ver qué pasa.
Vivir más
imaginar menos.
Cuidar el corazón, también desgasta.
y es por eso que habría que vivir más al día,
sin entender, explicar ni arrepentirse.
Sentir, solo sentir vorazmente.
Abandonar la conciencia
dejar de buscar los errores
evitar calcular las levitaciones y
y sobre todo, las caídas.
Dejar de medir los daños colaterales
o esperar el golpe.
Desplegarse.
Desplegarse.
Ser, sin tragedias ni esperanzas,
llorar más lágrimas reales
y atreverse a a entender que de eso, va la vida.
…Existir más,
Entender menos.